Tras varias horas encerrados y atrapados en el camión sin que nadie hiciera nada, los chillidos de los cerdos iban apagándose. No te puedes imaginar la impotencia que sentimos, no nos dejaban acceder al lugar, tampoco a los periodistas. Depois de várias horas trancados e presos no camião sem ninguém fazer nada, os gritos dos porcos iam diminuindo. Não podes imaginar a impotência que sentimos, porque não nos deixavam aceder ao lugar, nem sequer os jornalistas. Finalmente llegó una grúa y empezó a sacar cadáveres del camión, y los pocos que quedaron con vida (murieron 130 cerdos) vimos cómo los metían en otro camión, dándoles patadas.
Finalmente, chegou uma grua e começou a tirar os cadáveres do camião, e aos poucos que restaram com vida (130 porcos morreram) vimos como os metiam num outro camião, dando-lhes pontapés. Era la primera vez que sentían la luz del sol, después de una vida miserable hacinados en granjas. Era su primer y último viaje: camino del matadero.
Era a primeira vez que sentiam a luz do sol, depois de uma vida miserável amontoados em herdades. Era a sua primeira e última viagem: a caminho do matadouro. Pero esta vez al menos estuvimos allí, haciéndolos visibles. Silvia entró en directo en varios medios y dio voz a los animales, consiguiendo que esos gritos fueran escuchados por millones de personas.
Mas desta vez pelo menos estávamos lá, tornando-os visíveis. Silvia entrou em directo em vários órgãos de informação e deu voz aos animais, conseguindo que os gritos dos animais fossem ouvidos por milhões de pessoas. Tras estar allí, vinimos a la oficina. Era una mezcla de rabia, impotencia y tristeza lo que sentíamos. Aunque llevemos años documentando el horror que viven los animales, nunca te acostumbras a ello. Sus chillidos en el camión durante horas no los vamos a olvidar. Depois de estarmos lá, chegámos ao escritório. O que sentimos foi uma mistura de raiva, impotência e tristeza. Embora tenhamos documentado o horror que os animais vivem há anos, nunca te acostumas a isto. Não vamos esquecer nunca os gritos dos animais, durante horas, no camião. Y por eso estuvimos trabajando sin descanso para enviar a todos los medios de comunicación las fotografías y los vídeos, y lo más importante, contar lo que había sucedido, que más de cien cerdos habían muerto tras agonizar durante 5 horas en un camión sin recibir ningún tipo de auxilio. E por isso estivemos a trabalhar incansavelmente para enviar a todos os meios de comunicação social as fotografias e os vídeos e, o mais importante, contar o que havia sucedido, ou seja, que mais de cem porcos morreram depois de estarem a agonizar durante cinco horas, dentro de um camião, sem receber nenhum tipo de ajuda. |